HOY AL DESPERTARME
Hoy al despertarme pude comprobar,
no sin asombro,
adheridas a mi espalda
dos alas,
hechas con finos hilos de cristal
diamante líquido,
tan sutiles,
tan etericas,
tan emblemas de un amor,
que por distante,
alguien me ha fabricado estas
alas transparentes
para que pueda a su lado llegar,
sintiendo los dos ese instante,
en que la noche se vuelve un portal,
y eres tanto mar que me abrazas,
y tanto horizonte que me acercas,
y eres tanto atardecer entibiando
la sangre de mis congeladas venas,
y eres tanto sonido
de un océano embravecido
acariciándome,
eres tanta dicha,
tanta pasión,
y tanto espíritu
embelesando mi corazón,
estás desatando mi alma de la prisión,
condenada a su eterno cautiverio.
Hoy al despertar pude recordar
un sueño en el cual vivía,
y me hice eterna
en tus sinfónicas manos,
y me volví vulnerable
al poder de tus caricias
como brisa,
y me volví río
caudaloso,
desbordado,
diáfano,
tan solo mi cauce fue detenido
cuando tus piedras,
poderosas piedras
de mi río,
me abrazaron acunándome
en un recodo
del tempestuoso fluir de tus sentidos,
y se detuvo mi corazón
y se detuvo mi sueño,
y se detuvo mi vida,
y entré navegando
al río de la muerte
Aqueronte
al río de la muerte
Aqueronte
donde viví y morí,
en un instante,
en un instante,
Caronte,
me recibió
entregándome el indulto,
me había perdonado la vida,
porque mi muerte había sido por amor,
porque mi muerte había sido en tus brazos,
probando el sabor de tu licor,
probando un beso de tus encendidos labios.
Se me ha concedido una vez más
poder escuchar tu tibio corazón,
poder tocar tu piel
en el exilio de las sombras,
se me ha concedido
poder amar tu desgarrada alma,
besar tu secreta pasión,
se me ha concedido
poder gozar toda tu exultante alegría,
tu íntima devoción,
para continuar soñando con tu amor,
aunque nunca llegue el momento
de despertar junto a tu corazón,
latiendo junto al mío.
Cada día
amor mío y lejano,
tu alquimia de grandes obras,
tu puente de luz,
van dando forma
a mi forma,
tú narrador de profunda voz
tú alfarero
moldeas la materia sagrada
con tu aliento,
con tu pasto,
con tu barro
y tus memorias
dando vida al cuenco de mi ilusión,
donde me tomas
como sagrado elixir,
donde me tomas,
saciando la sed de tus horas.
Escucharte en la distancia,
y en los brazos de Morfeo
y en los brazos de Morfeo
ha sido más sublime
que apreciar la melodía
de una nostálgica Aria
en una noche de luna,
y escucharte en la distancia
ha sido poesía,
ha sido alabanza
de saberte tan noble,
de saberte tan eterno.
Mis memorias han despertado,
buscándote en el bosque de antiguos robles,
allí en esa tierra de soledad donde habitas,
yo me quedo gozando de tu inmensa sombra,
leyendo un tornasolado libro,
portando tus letras
de prosas sagradas,
eres la raíz que alimenta mis sueños,
eres el viento regalándome sonetos,
eres el tronco que me sostiene
portando la savia
que ha de regalarme la vida,
y te escucho como lejana voz
llamándome,
susurrándome
desde esa tierra ancestral
cuna de una civilización primigenia,
donde se gesta el verdadero comienzo de la vida,
desde donde me instas a recordar
que tú eres mi oxígeno,
eres mi vida,
eres mi pasión,
eres muerte y resurrección,
eres mi destino,
mi pueblo,
mi camino,
eres canción,
eres mi gran amor
habitando más allá del olvido,
porque tan solo con escucharte,
el tiempo se vuelve infinito,
donde amarte se vuelve abismo,
abismo que ya no temo,
abismo que me ha de llamar,
como la flor al picaflor,
como el amanecer al sol,
como la orilla al mar,
como el horizonte al océano.
Berkanaluz
D.R.
www.alasrotaspoesia.blogspot.com
La imagen fue tomada de internet
-Stille Amare-
-Handell-
-Ann Hallenberg -
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