SILENCIO Y DOLOR

SILENCIO Y DOLOR

El cuerpo 
se convierte a veces,
en un habitáculo 
insostenible 
de la carne,
cuyos miembros 
son tironeados,
por el implacable paso 
del destino.

Somos 
el olor a podredumbre 
y muerte
detenido solo 
por un espacio tiempo,
disfrazamos
el hálito profundo del mar
con perfumes exóticos,
lavandas,
mirras y benjuís,
otrora 
ungüentos 
concedidos
solo a los dioses.

Somos el paroxismo 
de la irrealidad,
disfrazado 
de realidades aparentes.

Solo un indulto
llamado perdón,
nos ha otorgado 
momentáneamente 
la vida,
él nos ha sacado 
de la fosa,
y nos ha permitido ver
por tan solo 
un instante 
de la eternidad,
la luz del sol.

Nuestros vestidos,
telas 
de seda y lino,
esconden 
las mortajas fúnebres,
que abrazan 
el último llanto 
de la despedida.

Estamos tan vivos,
como el instante 
del atardecer 
que muere 
día a día
en la playa,
consumiendo 
un poco más 
del combustible,
del gran astro rey.

Nuestra música 
toca desarticulada,
entre carcajadas 
iconoclastas 
y arrogantes 
egocentrismos,
ensordeciendo 
el tiempo,
contrastando 
con los alaridos 
de llanto y dolor,
que salen 
del propio infierno 
del mundo.

Somos 
soberbios 
y arrogantes,
nos fascina el dolor,
aunque queremos evitarlo,
el espejo nos muestra 
nuestra cara oculta 
de barbarie,
y no soportamos 
proyectar 
tanta muerte.

La gran grieta 
se abrió 
solo para mostrarnos,
que detrás 
de este mundo de ilusión,
ya no hay nada 
esperando,
en el principio
solo era  
obscuridad
y se hizo la luz,
solo para iluminarnos,
mostrándonos
que estamos muy solos 
en una habitación 
llena de dolor,
que estamos muy solos
sin nadie a quién amar,
sin nadie 
que pueda amarnos,
porque el amor
nuca fue
un objeto 
para atraparlo
dentro de un cuerpo 
putrefacto
y corroído
por la inexorable
esclavitud del tiempo.

El cuerpo 
se convierte a veces
en un habitáculo 
insostenible 
de la carne,
cuando quiere llorar
y no hay nadie 
que quiera consolarlo.

Quizás el silencio
abrace el temblor
otorgándole 
un poco de paz,
a este miedo 
tan atroz,
que por siempre
nos ha atormentado.

Silencio
solo quedará,
donde antes 
hubo dolor,
sufrimiento 
y llanto.
Berkanaluz
D.R.
www.alasrotaspoesia.blogspot.com
La imagen fue tomada de internet